viernes, 23 de agosto de 2013

No tengo ganas de vivir el día a día y aguantar todo cada día.
Me siento débil, me he quedado sin fuerzas.
Además, cada día tengo que trabajar duro para sonreír y tomarme las cosas a bien...
Pero...¿Cómo me tomo bien que me llamen gilipollas? ¿Cómo me tomo bien aguantar las críticas de mi padre hacia mi físico? ¿Cómo aguanto ver que al único al que le importo es a mi hermano? ¿Cómo tengo que soportar día tras día que me traten como la mierda? ¿Cómo? Esto no es vida ni es nada, esto es respirar porque sí y aguantar el dolor sin poder expresar tus sentimientos por no querer ser juzgada.
Me siento enjaulada, como si lo único que pudiera hacer es fingir sonreír y fingir estar feliz cuando por dentro soy un caos, una ruina, una chica perdida en sí misma.
Y me tengo que callar porque si supieran lo que pienso... Si tan solo supieran cómo me siento cada segundo...¿Acaso les importaría? No lo creo, como mucho me juzgarían y ya.
No tengo ganas de salir y descubrir porque tengo que coger todos mis pedazos rotos y recomponerme antes de hacer algo que me pueda causar más pena.
Y quiero huir.
De verdad que quiero alejarme de todo, solo con una persona a la que le importe todo lo que siento, pero no lo veo posible.
Huir no es una opción.
No tengo opciones, solo puedo mantenerme fuerte como sea o acabar ya con todo...

No hay comentarios:

Publicar un comentario